sábado, 27 de junio de 2020

¿Soñ(Amos)?

 

 Mi participación para 

" Despeg(Amos)"

del blog de Ginebra Blonde.

Más participaciones AQUÍ.


 



No sé cómo mis pasos desembocaron en aquél Night Club, tal vez fueron las notas de un piano que se dejaron oír levemente mientras esperaba la llegada del taxi que me llevaría a casa. La noche no estaba yendo todo lo bien que me hubiera gustado, así que me adentré instintivamente y lo primero que vi fue a él tocando una pieza que me trasladó a mis felices años en Luxemburgo.

Creo que se dio cuenta de que le estaba mirando de manera hipnótica ya que pronto iniciamos un juego de miradas. Había olvidado cómo se seduce o coquetea, acciones que solo uso en mis novelas. Sí, soy escritora, amo la literatura más que ella pudiera amarme a mí. Las editoriales son ese muro que salvar para poder completar ese amor.

Su voz interrumpió mis desvaríos, pidió permiso para sentarse a mi mesa. Con esa sonrisa era imposible negarle cualquier petición. Me sorprendió ese pensamiento. Pero ahí estaba yo compartiendo una copa con un desconocido y su mirada de coca—cola. Había acabado su turno, normalmente abandonaba el local en ese instante, pero no pudo resistir mi sonrisa de frambuesa. Así mismo lo dijo, y eso provocó que esta misma se ampliara y en mi cabeza se instalara el típico: ¿en serio ha dicho eso?

No pude evitar hablarle de su simpatía pero que en temas de seducción iba algo desfasado. Tema que más que molestarle le interesó. Así que empezamos un hilo de debate sobre maneras de entrar a las mujeres o a los hombres. Sin darnos cuenta la madrugada fue avanzando hasta que alguien dijo que el local estaba a punto de cerrar.

En un momento de nuestra conversación se coló: <<una última copa en su casa>>, a la que acepté. Y otra vez apareció esa incredulidad en mí. ¿En serio iba a ir al piso de un desconocido para tomar una última copa? Pues sí, una vez más allí estaba yo y el pianista encantador.

Si alguna vez me hubieran preguntado si había pensado un encuentro así, hubiera dicho rotundamente que no. El amanecer de la ciudad nos acompañó mientras hablábamos de ese sueño de triunfo, de los pasos y caídas con las que nos encontramos y de los sorbos dulces cuando conseguimos el deseado logro. Y allí mismo, en aquella terraza rodeada de hortensias coincidimos en que los sueños siempre hay que perseguirlos por muchas negativas que nos encontremos.  Un café más tarde y varias miradas cómplices sonó ese esperado: ¿Soñ(amos)?


©Auroratris

 

 


domingo, 14 de junio de 2020

AmorCósmico






Cogí las Estrellas de tus Ojos, y entonces hice un Mapa para guiarme en noches como esta donde me quedo absorta contemplando la oscuridad de la pantalla, ver cómo el diminuto punto luminoso va desapareciendo poco a poco, tan semejante a todo aquello que un día creamos.  Un Amor Cósmico, Fugaz como Lágrimas de San Lorenzo, las mismas a las que un verano le concedimos la Voz de nuestros Deseos.

Y después, las Estrellas, la Luna, todas se han apagado, me dejaste en la Oscuridad.  

 Este sueño no tenía sustento, por eso aquél castillo que se elevaba en las Nubes de nuestro invento se fue derrumbando con cada sacudida que asolaba los débiles cimientos de un Torpe Amor.

 Aun en la oscuridad sabía que de algún modo encontraría el camino de vuelta, que regresaría cada noche donde alguna vez Fui-Mos algo más que un sentimiento o la caprichosa alineación planetaria que los entendidos pronosticaron aquél año. Me permito recrearme en ese Cielo de emociones donde una vez brillé más que el Sol. Me alimento de recuerdos, puede ser, 

            sin embargo, 

                   a veces pienso, 

                                 más bien creo que,

                                                  ambos nos quedamos latiendo a Oscuras.

 

©Auroratris

 



Prouesta para el blog de Rebeca Gonzalo

#FuegoEnLasPalabras








viernes, 12 de junio de 2020

EsTarde...



Ester nos invitó a crear una continuación
50 palabras para dar rienda suelta 
a la imaginación y confeccionar una historia. 
Junto a la de otros compañer@s, 
mi aportación  fue premiada.
Gracias, por todo, mi Preciosa Ester.






Es tarde para lamentaciones, querido. Tuviste tiempo para cambiar los billetes y viajar juntos a París. ahora solo me queda la esperanza de que lo hagas y te reúnas conmigo la noche de mi cumpleaños. Te estaré esperando junto al Monumento al Soldado Desconocido. Si no acudes, lo entenderé todo.

© Auroratris