miércoles, 24 de marzo de 2021

HapPy

 





Lo hemos adoptado como un hijo más, hasta las vacaciones las planeamos de manera que no se sienta desplazado. Es verdad que duerme fuera de la caravana, comprenda que un San Bernardo de esa envergadura ocupa mucho espacio. Todo el mundo pone nombre a sus mascotas, nosotros le hemos registrado dentro del libro de familia, bien es cierto que hemos hecho un poco de trampa con los papeles. También le estamos buscando una novia que no viva muy lejos del barrio, será una boda por todo lo alto. Estoy segura de que a Canelo le gustará, ¿no cree doctora?



©Auroratris







lunes, 22 de marzo de 2021

ViajeViral

 

La frase inicial hace que continúe 

con la historia anterior.






Su incontrolable afición por los viajecitos interplanetarios me llevó a esa confusión. Gracias a él aprovecho la misma broma para usarla con mis amistades. Un día invité a comer allí mismo a mi nuevo compañero de trabajo. Le hice ir durante todo el trayecto con los ojos vendados, me divertía ver su sonrisa a la vez que imaginaba su cara de sorpresa cuando bajáramos del coche y le señalara el famoso cartel planetario, dando por finalizado el viaje espacial. Ahora este juego se ha hecho viral y no hay amigo o compañero que no sorprenda con una invitación tan particular.


©Auroratris



Microrrelato en Cadena

Para La Ser








lunes, 15 de marzo de 2021

A-Marte

 




Sus deseos de comprarlo todo en Marte me trasladaba a aquél encuentro. Recuerdo con ingenuidad la tarde en la que propuso llevarme allí a tomar un helado doble de chocolate. Solté una carcajada descomunal, algo que no le sentó muy bien haciendo que lo aceptara como un reto. Me subí a su moto, pegué mi cuerpo al suyo, en ese momento ya no importaba el nombre del planeta. Estaba tan feliz sintiendo su calor y la brisa del viento que no fui consciente de que habíamos llegado al destino. Con una gran sonrisa señaló el cartel luminoso: Centro Comercial Marte.


©Auroratris




Microrrelato en Cadena

para La Ser





lunes, 8 de marzo de 2021

SalvaMento

 



La mejor manera de canalizar mi vocación es dar el salto que todos temen y yo anhelo. Sí, ya sé que lo prometí, que nunca dejaría la tierra, la familia… Cuando el primer planteamiento apenas era un adolescente impúber. Se me tachó de ideas raras y de tener en la cabeza una jaula de grillos. Desde entonces ha llovido, el del espejo no es el mismo, su pensamiento sí. Que esta carta no sea motivo de disgusto ni de llanto, simplemente preciso el respeto de mi decisión porque no es lo mismo salvar que salvarse, la primera línea de guerra lleva mi nombre.


© Auroratris








miércoles, 3 de marzo de 2021

HéroEs

 



Habría sido insufrible ver a ese pedazo de cachas haciéndole el boca a boca. Le vi por el pueblo un par de veces. Creí que se dedicaba a la cría de reses en cualquier granja de la comarca. Su indumentaria me creó tal expectación. Vestía como si fuera un leñador con aquella camisa de cuadros, las mangas remangadas de manera estratégica dejando ver el volumen de los bíceps. Nada apuntaba a que se trataba del nuevo veterinario. La sorpresa la tuve aquél jueves cuando un coche pilló a “Pelusa”. Su corpulencia se contrarrestaba con el delicado trato al coger a la gata para la exploración. Ahora es nuestro héroe.

 

©Auroratris







lunes, 1 de marzo de 2021

Tiempo-Nos

 


Mi participación 

en la propuesta "Una Idea"

del blog de Ginebra Blonde.

Más participacioens AQUÍ






Christian Schloe


Antes de que sonara el repiqueteo de campanas del viejo reloj de la catedral, Sara, se levanta sigilosamente, cubre su nívea desnudez con la brevedad de un batín satinado, sale a la terraza para contemplar la primera línea alba que deja atrás el calor de la noche. Desde su lugar divisa la gótica fachada haciéndole recordar el último viaje, una escapada de fin de semana, pero… ¿qué es el tiempo cuando lo que está en juego vale mucho más?

Siente un escalofrío reviviendo escenas de aquél invierno y, no precisamente por el frío que pasaron durante la fugaz visita. Amberes, nevada, les regaló las mejores vistas desde cualquier ángulo del cuarto, sus cuerpos desnudos se fusionaban con la presente belleza descomunal del monumento, pegados como manecillas de medianoche protagonizaron una danza sensorial queriendo hacerla partícipe de su creación. Se sonrió al definir de esta manera este momento de dos.

Un beso en la nuca la sitúa de nuevo en la plácida realidad. La música se abre paso desde el salón haciéndola disfrutar de la tierna envoltura de unos brazos cosidos a su cuerpo. La barbilla de él reposa sobre su hombro derecho, la boca a la altura precisa para susurrarle: “Hagámoslo, sea lo que sea que estés pensando… Hagámoslo”

 

© Auroratris.